Toros: la vergüenza de Madrid
Madrid es una gran capital pero no llegará al nivel de otras europeas o americanas mientras tenga esa lacra de los toros.
Es algo incomprensible su existencia. Los toros no son una cuestión de gusto ni de cultura sino de ética. Mantenemos esa idea de que el sufrimiento de los animales no importa, lo minimizamos y lo ocultamos.
Pregunta para, su mismo diario, ¿cuál es la razón de que los diarios no se hagan eco de toda la multitud que está en contra de esta barbarie? ¿Pondrían ustedes una foto de un toro echando bocanadas de sangre o cuando en el suelo en su agonía mueve las patas sin control, mientras el torero como un vulgar pandillero se chulea con aires de vencedor y le da 'la puntilla' moviendo el punzón de un lado a otro sin ningún sentimiento de empatía?